domingo, 5 de enero de 2020

NUESTRA CARTA A LOS REYES MAGOS

Queridos Reyes Magos:

Un año más, volveis a colmar los corazones de grandes y pequeños con vuestra presencia, consiguiendo que, en estas fechas especiales, volvamos a percibir nuestras vidas y nuestros anhelos a través de los ojos de la infancia y disfrutemos con revivir en el interior de nuestras almas la blanca verdad del corazón de los niños que, desgraciadamente, sufre deterioros inherentes a la condición humana a medida que nos van condicionando los años.

Lo que tenemos la osadía de pediros no es para nosotros, es para la Hermandad de Los Gitanos. Esa Hermandad a la que todos tanto queremos y de la que nos sentimos orgullosos por su trayectoria a través de los siglos y de la que nunca quisiéramos perder los valores heredados por todos esos que nos precedieron y asentaron las líneas de de nuestros caminar.


Queremos ofreceros, antes que nada, nuestras más sinceras disculpas, de  parte de unos hermanos que, como eso, como hermanos, discutimos y nos enfadamos, tenemos discrepancias, somos de gustos dispares, pero, ante todo, amamos a nuestros Sagrados Titulares y a la Corporación a la que con tanto orgullo representamos.

Este año vuestros obsequios han venido por adelantado con la asignación del Señor de la Salud como imagen que representará a nuestra Semana Santa en el Viacrucis de la Hermandades organizado por el Consejo de Cofradías.

También ha sido un regalo la inauguración de la segunda planta de nuestra casa de hermandad y la cercanía de estrenar también la planta sótano.

Pero lo más importante que necesitaremos para el nuevo años nuevamente será la salud. Esa salud que nos otorgue las fuerzas necesarias para poder seguir queriendo a nuestra Hermandad. Para que se limen asperezas entre hermanos. Para que nuestros representantes de la Junta de Gobierno velen porque no se nos ningunee ni se nos obvie en las decisiones de importancia de la Sevilla Cofrade. Para que estos mismos Oficiales de Junta sean siempre receptivos a las sugerencias, y por qué no, a las discordancias que propongan los hermanos de la Corporación demostrando que con su trabajo y su temporal posición tienen las ideas claras de que no son los dueños de la Hermandad, sino los auténticos servidores de su nómina de hermanos.

Te pedimos también que sigais regalando ese torrente de ideas novedosas y excelentes a nuestro equipo de priostía, que sigáis manteniendo la ilusión y el espíritu de trabajo y sacrificio de todas las personas que dan vida y sentido a nuestra Bolsa de Caridad, y que nuestra mayordomía siga actuando con la claridad de ideas, la organización exquisita y la transparencia infinita de un trabajo bien realizado y al que no se le pueden poner casi ninguna pega.

Esos regalos seguirán manteniendo y aumentando una época de estabilidad que tanto estábamos necesitando aumentando la tranquilidad y la buena armonía de esta Institución que tanto amamos.

Gracias a S.M. los Reyes de Oriente, porque aunque no siempre nuestro comportamiento sea el más adecuado, y en momentos de ofuscación, nuestros actos se basen en egos personales y rencores ajenos a la Corporación, estamos seguros que sabreis disculparnos, ya que, como seres humanos somos imperfectos, pero al mismo tiempo, como hermanos de la Hermandad Sacramental de Los Gitanos, nos sentimos tan orgullosos.


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